«Es la evidencia del fracaso de una política»

Rajoy y Sánchez critican con dureza el adelanto de las elecciones

Gobierno y PSOE coincidieron ayer en que la convocatoria de las elecciones catalanas para el mes de septiembre pone en evidencia el fracaso de Artur Mas. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, señaló en una entrevista con Efe que el anuncio del presidente de la Generalitat supone «la constatación y la evidencia del fracaso de una determinada política que sólo ha generado inestabilidad e incertidumbre».

El jefe del Ejecutivo ha subrayado que en menos de cinco años se han celebrado en Cataluña tres elecciones autonómicas, y que, este año, «va a someter a los ciudadanos catalanes a una campaña electoral de ocho meses», puesto que en mayo se celebrarán las municipales y en otoño, las generales.

«Aquí se dijo: hay que intentar resolver un lío y un problema que tenemos ERC y CiU, y la decisión se ha tomado por puro interés partidista», lamentó el presidente del Gobierno, quien espera que sean los ciudadanos catalanes los que den su opinión sobre un asunto que a él le parece de «una extraordinaria gravedad». Varios ministros y dirigentes del PP cargaron también contra Mas por llamar a los catalanes a las urnas en tres ocasiones en cinco años.

En idéntico sentido se pronunció ayer el secretario general del PSOE, de viaje oficial a Washington. Tras entrevistarse con la ex secretaria de Estado norteamericana Madeleine Albright, Pedro Sánchez aseguró a los periodistas que el adelanto electoral demuestra la «incapacidad» para gobernar de Artur Mas, que «cuenta sus legislaturas a golpe de año y medio» y nunca concluye sus mandatos.

También él espera que los ciudadanos catalanes digan «basta ya» al actual presidente de la Generalitat. El líder socialista atribuyó el adelanto a «las batallas de poder» de Mas y Junqueras, «que nada tienen que ver con las preocupaciones de la ciudadanía».

Distintos dirigentes socialistas criticaron asimismo con dureza a Artur Mas, a quien acusaron de irresponsabilidad por haber dividido a la sociedad catalana.

La ex ministra y diputada del PSC, Carme Chacón, aseguró en la Sexta que el adelanto electoral es un nuevo «fracaso» del presidente catalán, Artur Mas, que se suma a las elecciones anticipadas de 2012 en las que CiU perdió 12 escaños y a la consulta del 9-N, en la que «sólo tres de cada 10 catalanes dieron apoyo a su aventura independentista».

El secretario de Acción Política, Ciudadanía y Libertades del PSOE, Patxi López, calificó el acuerdo de Mas y Junqueras como «el último sainete en el que el nacionalismo ha convertido a la política en Cataluña». «No es el pacto de la unidad, sino el acuerdo para partir en dos a la sociedad catalana», explicó.

«Tras semanas jugando al despiste, en una especie de subasta tan esperpéntica que el propio Artur Mas tuvo que pedir disculpas, anunció la fecha de las elecciones, que se había estado reservando estratégicamente», dijo López, quien lamentó también que Cataluña vaya a vivir la campaña electoral «más larga de la Historia».

Tanto Patxi López como Carme Chacón resaltaron que Artur Mas pretende seguir hablando única y exclusivamente del independentismo –anunciando incluso la creación de estructuras de Estado, que es manifiestamente ilegal– para ocultar su nefasta gestión durante la crisis. La ex ministra de Defensa denunció que ha aumentado el paro y las listas de espera. Y Patxi López añadió que «poco le importan los recortes en los servicios públicos, que son los mayores de toda España».

Incluso Enric Martínez, el portavoz de la candidatura Podemos Unidos, alternativa a la oficial, coincidió con las tesis de PP y PSOE. Según Martínez, el presidente de la Generalitat comete «una grave irresponsabilidad» con la convocatoria electoral, con la que intenta tapar «la corrupción de CiU».

En declaraciones a Servimedia, Martínez aseguró que su «proyecto utópico e irrealizable de independencia fue derrotado clamorosamente el 9 de noviembre» y reprochó al presidente de la Generalitat que no se ocupe de «los problemas de los catalanes, como el desempleo, la precariedad laboral, la sanidad, la pobreza y la desnutrición infantil».