Sonidos de la historia

Un buen archivo es un monumento cultural. Si, además, se utiliza para informar y educar se convierte en una herramienta magnífica. Prescindir de ella es de necios y, desgraciadamente, es lo que se ha hecho en España durante años.

Los aniversarios, la crisis –que obliga a inventar programas baratos y de calidad– y el buen criterio de sus directivos nos permite hoy escuchar joyas sonoras en RTVE y en la Ser que muy pocos recordaban.

El sonido de la Historia, programa de Rafael Bermejo y Javier Monterde que Radio 5 emite cada madrugada de los sábados de 1.00 a 2.00 horas desde enero, recoge los acontecimientos más destacados de una semana a lo largo de la historia. Junto a los sonidos, primando los exclusivos de RNE, se incluyen músicas de la época y algunas canciones.

Se estrenó el 13 de enero con la entrada de Fidel Castro en La Habana, los cumpleaños de Juan Carlos de Borbón, la liberación de Auschwitz, la rotura de la presa de Ribadelago y la muerte de Valle-Inclán. El 4 de mayo abordó el final de la Guerra de Vietnam, la captura de Bin Laden, la fuga de Luis Roldán, la muerte de Hitler, el Watergate y el caso de la colza desnaturalizada.

El pasado miércoles, coincidiendo con la fiesta de San Isidro, Ángeles Afuera, responsable de documentación en la Ser, nos regaló la primera grabación, de 1948, del chotis Madrid por la cantante mexicana Ana María González.

«Lo descubrimos al digitalizar una serie de discos de pizarra que dormían en nuestros archivos», explicó en La ventana. «La carátula sólo tenía un título, Ana Mª González, y pensamos que era grabación de cara al público… La sorpresa llegó cuando, digitalizado, escuchamos lo que había dentro».

«La voz luminosa de México, recién llegada a Madrid…», anuncia un locutor, puede que José Fernando Manzano, «con un valioso presente de hermandad y de arte de uno de los más famosos compositores del mundo, el mexicano Agustín Lara, quien lo compuso hace sólo 8 días».

Por los términos utilizados –«agasajo postinero, en la crema de la intelectualidad», dedicado a Chicote–, hay quien dice que Lara compuso la música y compró la letra a un exiliado español mal de pelas llamado Rafael Escalona.

«Cuando lo escuché, me quedé de piedra», confesó Afuera. «Consulté la hemeroteca de ABC, que guarda los estrenos en la sala madrileña de moda de entonces, Villa Romana, y comprobé que el estreno era al día siguiente, por lo que teníamos en nuestras manos la primera grabación para gramófono, en estos estudios, del chotis que escucharon entonces nuestros oyentes».