Un nuevo medicamento en crema se une al mercado de fármacos para el tratamiento de la disfunción eréctil (DE), más conocida como impotencia sexual. Se trata de alprostadilo en pomada, disponible en España desde el pasado mayo y que se administra con un aplicador monodosis. Una pequeña cantidad en la punta del pene actúa de forma directa sobre la erección. Es el primer tratamiento tópico para esta enfermedad y puede ser utilizado por pacientes cardíacos, hipertensos y diabéticos; siempre mediante prescripción médica.
En la actualidad, más de dos millones de españoles tienen impotencia, una de las disfunciones sexuales más frecuentes junto con la eyaculación precoz. Es una patología asociada a la edad y, según diferentes informes, su incidencia se cifra entre el 2 y el 10% en hombres de entre 40 y 50 años; entre el 30-40% en hombres de entre 60 y 70; y en más del 50% en mayores de 70.
Hace 18 años que llegó la famosa pastilla azul, más conocida como Viagra, a la que siguieron Levitra y Cialis y, hace apenas un año, apareció un nuevo medicamento conocido con el nombre de Spedra. El mercado en España se disparó más si cabe en el año 2013 con la aparición de los genéricos, fundamentalmente por sus ventajas en el precio. Ahora llega el tratamiento tópico.
Una revisión de estudios publicados en la revista Urology, realizada por el doctor Ignacio Moncada, jefe del Servicio de Urología del Hospital de la Zarzuela junto con la doctora Béatrice Cuzin, del Hospital Universitario E. Herriot de Lyon (Francia) ha constatado su eficacia, de un 86%. De una muestra de aproximadamente 600 pacientes (en su segunda fase), el 83% de los que estaban diagnosticados de impotencia grave notó una mejoría en sus erecciones.
«Consigue un efecto rápido desde los primeros minutos, logra una rigidez entre los cinco y 30 desde su aplicación y puede durar más de una hora. Además, no interacciona con otros medicamentos, ni alimentos o bebidas alcohólicas», explicó ayer Moncada en rueda de prensa. La pomada «cubre necesidades que no estaban cubiertas», prosigue, «cuando miramos los medicamentos se constatan fundamentalmente tres factores: eficacia, seguridad y la posibilidad de usarse fácilmente. Este medicamento cubre estas tres partes: su uso es fácil ya que se aplica directamente en el pene (donde está el problema) y puede administrase minutos antes de la relación sexual, mientras que los demás fármacos tienen que administrarse una o dos horas antes», explicó.
Se adquiere sólo en farmacias, con receta médica, y requiere refrigeración. «Es una caja de cuatro comprimidos y su precio es de 47 euros», señaló Miguel Isla, director general de Laboratorios Casen Recordati. Natalio Cruz, responsable de Andrología en el Hospital NISA Sevilla Aljarafe y jefe del Servicio Andrológico Andromedi añadió que está indicado como primera opción, o bien cuando otras no funcionan.
A lo largo de su vida, mayoría de los hombres sufre algún problema de erección debido a ciertos factores como medicamentos, estrés o enfermedades puntuales. «Se trata de una patología asociada con la edad y es más común en aquellos pacientes que tienen diabetes, hipertensión, problemas neurológicos, cardiovasculares, prostáticos o de colesterol y el tabaco y el alcohol también influyen», detalló Cruz.
Sin embargo, a pesar de ser una de las disfunciones sexuales más frecuentes, se trata de una patología infradiagnosticada y subtratada: tan sólo el 20% consulta su problema con el médico. «Los motivos más frecuentes son la vergüenza, sobre todo si el especialista es una mujer, los factores culturales o porque no se le da la suficiente importancia», advirtieron.