Jordi Pujol hijo evadió a Luxemburgo por lo ‘inestable de España’

En 2011 justificó de este modo el ingreso de 7,2 millones en Credit Suisse

Jordi Pujol Ferrusola asegura que se llevó 7,2 millones –procedentes del cobro de comisiones– a Luxemburgo en 2011 y 2012 «por la situación de inestabilidad financiera de España». Ésta es la explicación que ofreció a Credit Suisse del Gran Ducado cuando ingresó estos fondos en su cuenta corriente.

Jordi Pujol Ferrusola y su mujer, Mercé Gironés, ocultaron al menos 7,2 millones en Luxemburgo entre 2011 y 2012 empleando como coartada «la situación de inestabilidad en el mercado financiero español». Éste fue el argumento formal que el matrimonio, al que el juez Pablo Ruz imputa blanqueo y delito fiscal, facilitó a las entidades bancarias cuando hace tres años decidió abrir una cuenta en el Credit Suisse de Luxemburgo para transferir fondos desde cuentas españolas.

Poco después de trasvasar el dinero a Luxemburgo, el hijo mayor del ex presidente autonómico catalán y su esposa repatriaron de golpe el dinero a España después de que el Credit Suisse luxemburgués les solicitara «información adicional» sobre el origen del dinero.

Según los datos que obran en poder del Banco de España, la Policía y la Fiscalía Anticorrupción y a los que ha tenido acceso EL MUNDO, Pujol Ferrusola y su esposa articularon la operativa a través de Iniciatives, Marketing i Inversions, una de las entidades que utilizaron para el cobro continuado de comisiones de manos de grandes contratistas de la Generalitat catalana a cambio de asesorías ficticias. En total, y tal y como ha constatado ya la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef), mediante esta y otras empresas pantalla, el hijo mayor del ex presidente autonómico catalán ha percibido durante los últimos años más de ocho millones de euros sin que conste soporte documental alguno de los trabajos supuestamente realizados por él a empresas como Isolux o Copisa.

Iniciatives, Marketing i Inversions comenzó el trasvase de dinero a Luxemburgo el 14 de diciembre de 2011. Ese mismo día el matrimonio ordenó transferir 4.097.360 euros a la nueva cuenta LU42078002700641200, que abrieron en el Credit Suisse de Luxemburgo el día anterior. Previamente, Pujol Ferrusola y su esposa habían ingresado ese dinero en una cuenta del Credit Suisse en España mediante sendas transferencias de 2.596.970,33 euros y 1.500.000 euros procedentes de dos cuentas a su nombre en el Santander y el BBVA.

No terminó ahí el desvío de fondos a Luxemburgo. El 31 de mayo de 2012, Jordi Pujol Ferrusola emitió una nueva orden de pago con el mismo destino desde una de las cuentas españolas que comparte en el BBVA con su esposa. En esa ocasión el importe de la operación ascendió a 306.000 euros, que procedían de la cancelación de un depósito a plazo constituido en octubre de 2010 por importe de 400.000 euros. La cuenta de destino del Credit Suisse de Luxemburgo fue la registrada como LU910780018678952000.

Poco después, el 5 de junio de 2012, la misma sociedad, Iniciatives, Marketing i Inversions, emitió una nueva orden de pago dirigida al Credit Suisse luxemburgués. Esta vez por valor de 2.840.000 euros, que acabaron en el primero de sus depósitos abiertos en el banco.

Los investigadores ya han podido determinar con precisión el origen concreto de estos fondos. Tras seguir el rastro del dinero la Policía ha podido establecer que al menos 2.780.595 euros proceden directamente de un pago librado al matrimonio por Isolux a través de Bankia, por una de las operaciones inmobiliarias lideradas por Pujol Ferrusola en México. Concretamente, por los «derechos» del macrocomplejo turístico Azul de Cortez, ubicado en Baja California Sur. Una operación desvelada por este periódico, en la que el hijo mayor del ex presidente autonómico obtuvo en tiempo récord una comisión de 9,7 millones en sólo dos años de manos de este gigante español de las infraestructuras, que recibe cuantiosos contratos del Gobierno catalán. Ninguno de los intervinientes en esta operación ha podido acreditar a la Udef en qué consistió la labor realizada por Pujol Ferrusola para cobrar esos honorarios.

Jordi Pujol Ferrusola y su esposa decidieron súbitamente el 27 de noviembre de 2012 traer de nuevo a España los fondos desviados. De esta manera, transfirieron de golpe 6.947.764,94 y 306.012,18 euros a cuentas suyas en el BBVA. El motivo de esta repatriación, tal y como han podido documentar ya los técnicos del Banco de España, se debió a que el Credit Suisse solicitó al matrimonio «información adicional».

Acto seguido, ese dinero acabó en otra de las sociedades del matrimonio. Esta vez en Irigem 2012, constituida poco antes, el 6 de noviembre de 2012, con un capital social de 7.653.125 euros, una fecha que, resaltan los investigadores, es «muy próxima a la repatriación de sus saldos en Luxemburgo».