Se va otro héroe

ECHENIQUE el de la tele –no confundir con el de Vocento– ha huido del Pirulí. Su tarea era mantener la ficción de una ficción, una empresa dizque pública para garantizar el pluralismo político del medio. Y la última hazaña de Echenique Minor ha sido aceptar la censura de UGT, que impuso, tras la clásica campaña injuriosa, la expulsión de Juan Ramón Rallo de un debate económico en el programa de Mariló Montero. La indignación de UGT no se debe a que Rallo haya robado en algún curso de formación o haya aprovechado un ERE para trincar el dinero de la UE para los parados. Eso hubiera sido competencia desleal con UGT-Andalucía que, en otro país, habrían ya disuelto como asociación para delinquir. Pero eso no molestaba a UGT-RTVE: lo que el heroico sindicato prohibió y el heroico Echenique Minor aceptó es que Rallo, catedrático, colaborador de Libertad Digital y liberal, o sea, tres veces delincuente, apareciera unos minutos a la semana en un programa matinal de la televisión pública. No puede tolerarse –y no lo han tolerado– que un partidario de la privatización de los espacios públicos cuya gestión pueda mejorar la iniciativa privada asome un ratito por el Pirulí. Echenique ha asumido la doctrina institucional de Cándido EREMéndez: puede haber representantes hasta de la ETA en el Parlamento, pero no liberales en TVE. ¡Sólo faltaría!

El Herculique del pluralismo, el Crispinique de los intereses creados –y cobrados– ha esgrimido un argumento moral inapelable para huir antes de las elecciones que pueden liquidar el imperio que lo pirulizó. Resulta que Montoro, del que era chambelán cuando empezó a investigar a los Pujol, no le ha dado 130 millones de euros más para cubrir los gastos del imperio sindical que manda en RTVE. Tenía que reajustar la plantilla y, claro, hacerle un ERE legal al imperio de los ERE fraudulentos era mucho trabajo para este sorayo que a mí siempre me ha parecido un Arenas 1998. Así que, antes que enfrentarse a los sindicatos, se larga a lo que llaman la empresa privada, que es tener el teléfono particular del poder político. ¡Y se meten con Pedro Sánchez por ir a Sálvame! La única salvación que yo le veo a TVE es que hagan fijo a Cándido en el polígrafo de Conchita y que, si se deja, hagan Echenique a Paolo Vasile. O a Gallardón, perito en ruinas