Nadal ve difícil «dialogar» con Endesa por ser de otro Estado

El secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, cargó ayer contra Endesa, a la que acusó de entorpecer el diálogo para resolver el nuevo marco regulatorio para la reforma energética.

«Hay una empresa eléctrica clave que posee las centrales. Y el principal accionista de esa empresa es un Estado miembro de la UE. No son las mejores condiciones para negociar con ella. Mientras el diálogo con el resto del sector es fluido, no siempre es fluido con un consejo de administración que está sentado en otro país», señaló en declaraciones recogidas por Efe.

Nadal realizaba ayer su primera comparecencia en la Comisión de Industria, Energía y Turismo del Senado desde que fue nombrado el pasado mes de enero con el fin de sacar adelante la reforma energética. No aludió a ninguna compañía pero la referencia a Endesa fue clara: el grupo presidido por Borja Prado opera las centrales térmicas de carbón de mayor potencia de todo el país y desde 2009 está participada en un 92% de su capital por la italiana Enel.

«Contra lo que ha dicho el señor Nadal, nuestro consejo de administración no está en ningún país extranjero sino en España», recordaron fuentes de la compañía. Estas mismas fuentes añadieron que Enel se convirtió en 2009 en accionista principal de Endesa cumpliendo todos los requisitos impuestos por los reguladores tras el fracaso de una operación de compra planteada previamente por la alemana eON. «Además -continuaron- un Estado democrático miembro de la UE merece el mismo respeto y tiene los mismos derechos que el Estado español».

Sorpresa

La eléctrica subrayó su disposición al diálogo, aunque mostró su sorpresa por el hecho de que el secretario de Estado considere extranjera una empresa que emplea a 11.500 trabajadores españoles, que invirtió 2.700 millones el año pasado y se ha comprometido a desembolsar otros 2.000 hasta 2014.

Nadal detalló los problemas a los que se enfrenta el sector energético, entre los que ha destacado el déficit de tarifa, que se produce porque los ingresos del sistema no cubren los costes y que acumula ya una deuda superior a los 28.000 millones de euros.

El secretario de Estado adelantó que este año se alcanzará el equilibrio entre costes e ingresos pero advirtió que la solución no será definitiva, sino que esta vendrá de la reforma que presentará antes del 30 de junio.