El rey Baltasar 'sin papeles'

Este inmigrante senegalés, 'Mago' en una cabalgata popular, está en un Centro de Internamiento de Extranjeros a la espera de ser expulsado

Gamou Dieng, el Rey Baltasar de Carabanchel. / E. M.

A los Magos de Oriente se les presupone el don de la ubicuidad para, cada madrugada del 6 de enero, dejar regalos o carbón, según corresponda, en las casas de todos los niños del mundo. Pero al Rey Baltasar de Carabanchel (Madrid) los barrotes del Centro de Internamiento de Extranjeros en el que está atrapado le han anulado este año los superpoderes.

Su Majestad de piel ébano quedó registrada el pasado 13 de diciembre como Gamou Dieng en esta no cárcel de la capital, pese a que las estrictas medidas de seguridad recuerdan tozudamente a esos edificios grises de donde uno no puede salir libremente hasta que no ha cumplido una condena judicial. Según los vecinos y allegados que han puesto en marcha una campaña ciudadana para su liberación, el único delito que ha cometido este monarca de barrio ha sido el de no llevar encima los papeles adecuados.

La Jefatura Superior de Policía de Madrid, sin embargo, tiene una versión menos risueña de este cuento de Navidad, que probablemente no tendrá un final de esos en los que uno se atiborra a perdices: el Baltasar de Carabanchel, sin capa ni turbante el día de autos, fue pillado in fragantti por un agente fuera de servicio tras robarle un bolso mediante el método del tirón.

El programa informático que recopila los antecendentes de los detenidos reveló entonces que había incumplido desde 2009 una orden de expulsión del país durante cinco años, además de acumular seis delitos contra la propiedad intelectual por venta de productos pirateados en el top manta.

Así que, o lo impide un milagro de esos que llevan por banda sonora el soniquete de un villancico, o este Rey sin cetro, que vino de Senegal en cayuco y no de Oriente en camello, no podrá encaramarse el próximo sábado a la carroza desde la que reparte ilusión por las calles del sur de la capital desde hace algunos años.

Para evitar que en esta cabalgata popular se dé la paradoja de que los tres Magos sean dos, que es sólo la anécdota de una reclamación social con más calado, los representantes de una decena de colectivos de Carabanchel han pedido a la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, la liberación de su Baltasar.

«Desconocemos las circunstancias concretas de su internamiento, pero consideramos que el hecho de no tener los papeles en regla no es motivo suficiente para tener a una persona retenida ni ser expulsada de nuestro país», alega Pedro Casas, presidente de la Asociación de Vecinos de Carabanchel, que apela a la «presunción de inocencia» del Rey negro del barrio.

Desde que entró en vigor la nueva Ley de Extranjería en 2009, los inmigrantes pueden permanecer retenidos en alguno de los nueve Centros de Internamiento de Extranjeros de España hasta un plazo de 60 días antes de ser extraditados a sus países de origen.

El último desfile de Gamou Dieng por las calles de Madrid podría ser el 10 de enero, pero no para repartir caramelos a los niños, sino para montarse, ya sin boato, en un avión de vuelta a Senegal.