La Ceapa pide no llevar a los hijos a clase en la primera huelga de padres

La confederación mayoritaria de la escuela pública llama a «vaciar» las aulas el jueves 18

En un acto sin precedentes en España, la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa) convocó ayer la primera huelga educativa protagonizada por familias.En un gesto insólito, ha llamado a los progenitores a «vaciar» los colegios públicos y los institutos de todo el país el próximo jueves 18, «no llevando» a los niños a clase «para defender sus derechos».

La confederación mayoritaria de familias protesta, de este modo, por los recortes que está sufriendo la enseñanza y por la reforma educativa del Gobierno. Las cosas tienen que estar muy mal cuando son los propios padres los que justifican que sus hijos falten al colegio.

«La gravísima situación actual demanda una respuesta contundente. Estamos ante un ataque sin precedentes a los derechos del alumnado y de las familias, con recortes salvajes en la educación española que se agravan por la coincidencia con otras medidas igualmente inaceptables», denuncia la Ceapa en un comunicado, en el que menciona, entre otras cosas, la reducción de las becas para el comedor y de las ayudas para libros de texto, «que no hacen otra cosa que castigar las ya maltrechas economías familiares».

No en vano, el presupuesto educativo del Gobierno para 2013 se ha reducido un 14% respecto al año anterior y un 31% en relación a 2011. «En este momento, hay niños que no tienen profesores, ni libros de texto, y hay colegios en los que se da la clase en el suelo. Es un país tercermundista», denunció en rueda de prensa José Luis Pazos, portavoz de la Ceapa.

Por eso han decidido sumarse a la convocatoria del Sindicato de Estudiantes, que ha llamado a todos los alumnos a participar en 72 horas de huelga: el martes 16, el miércoles 17 y el jueves 18.

La Ceapa, por su parte, sólo ha convocado un paro general el jueves 18, al que están llamadas las familias de todos los colegios públicos e institutos de todas las comunidades autónomas y de todos los niveles educativos, desde infantil a la universidad. Es decir, que el día 18 faltarán a clase los alumnos por partida doble: por la huelga de estudiantes y por la huelga de sus padres.

Los profesores, eso sí, estarán en las aulas. «Hemos pedido expresamente a los docentes que no convoquen huelga esa semana», dijo Pazos. «Han asumido muchas y ahora nos toca a nosotros. Ésta tiene que ser una huelga diferente, hecha por los estudiantes y las familias». Los sindicatos CCOO y UGT, en cualquier caso, respaldan la protesta, aunque no han pedido a sus afiliados que falten a clase.

La Ceapa agrupa a 12.000 asociaciones de la escuela pública, lo que, en sus propios cálculos, representa a unos ocho millones de familias. La otra gran agrupación, la Confederación Nacional de Padres de Alumnos y Padres de Familia (la católica Concapa) da voz a 3.500 asociaciones de la escuela privada: unos tres millones de familias.

Entre las dos aglutinan al 95% de los padres de todos los centros educativos españoles y hace unas semanas protagonizaron un hecho histórico al dar juntas una rueda de prensa para denunciar los recortes.

La Concapa está enfadada con el ministro José Ignacio Wert, pero no hasta el punto de llegar a una huelga. Habla su presidente, Luis Carbonel: «Respetamos la postura de la Ceapa, pero no la compartimos porque supone que nuestros hijos pierdan clase. Una huelga educativa no puede cursarse en días lectivos. Estamos a la cola de Europa en resultados educativos, como para perder más días... Eso sí, compartimos los motivos y el malestar generalizado por los recortes».